Sierra Gaúcha es una región montañosa colonizada por italianos en el sur de Brasil que se está haciendo un nombre en el mundo de los vinos de calidad.
Aspira a incluir al mayor país de Latinoamérica en la lista de los mejores productores emergentes de vinos, al lado de Argentina, Chile, Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda.
Todo comienza en Sierra Gaúcha
Sierra Gaúcha reúne un puñado de municipios del estado brasileño de Río Grande do Sul, como Bento Gonzalves, Garibaldi y Caxias do Sul, que concentran cerca del 90 por ciento de la producción de vinos de Brasil.
El cultivo de la uva y la producción del vino fueron introducidos en esta zona por inmigrantes italianos, ya que unos 84 mil de ellos se establecieron en la región entre 1.875 y 1.914 atraídos por la oferta de tierras.
Una tercera parte de los actuales habitantes de Sierra Gaúcha desciende de italianos y muchos conservan costumbres traídas por los inmigrantes de Lombardía y Véneto, que se reflejan en eventos tradicionales como la fiesta de la uva y la fiesta del vino.
Renovación para conquistar el mercado
Los italianos radicados en la Sierra Gaúcha ya producían en 1.884 cerca de 8 millones de litros de vino y fundaron las primeras cantinas a comienzo del siglo XX, generalmente establecimientos familiares, algunos de los cuales aún existen.
"Mi familia cultiva estas tierras y produce vino desde que llegó a Brasil hace más de un siglo, pero ahora sustituimos las antiguas cubas de madera por las de acero, introducimos nuevas tecnologías y estamos practicando lo que mis hijos aprendieron en los cursos de especialización que hicieron en Italia", cuenta Ivor Demi Tonet.
La "Cantina Tonet", donde se procesa la producción de 16 hectáreas de viñedos, ofrece al mercado reservas de Cabernet Sauvignon y Merlot.
Esta bodega, que conserva algunos procesos artesanales y tiene una vocación para el turismo, acaba de aplicar el mismo proceso de industrialización y de especialización en vinos que hace unos quince años convirtió a otras bodegas de la región en grandes centros vinícolas del país.
"Brasil apenas tiene diez años produciendo vinos de calidad.
Argentina y Chile, que hoy dominan el mercado brasileño y cuentan con competitividad internacional, tienen mucho más tiempo", explica Everaldo Seige, enólogo de una de las empresas vinícolas que se industrializó hace una década y comenzó a invertir en vinos de calidad, sin abandonar sus tradicionales vinos de mesa.
Esta empresa tiene productos renombrados y exporta cerca de 70 mil litros anuales a Estados Unidos, Jamaica y República Checa.
Los italianos radicados en la Sierra Gaúcha ya producían en 1.884 cerca de 8 millones de litros de vino y fundaron las primeras cantinas a comienzo del siglo XX, generalmente establecimientos familiares, algunos de los cuales aún existen.
Desde 1.995 Brasil se convirtió en un miembro de la organización internacional de vino, y en las montañas Gauchas se creó el vino Valley (transportado desde el Vale dos Vinhedos).
En el presente día los espumosos vinos Brasileños han obtenido premios en muchas competiciones internacionales.
La cosecha de 1.999 y 2.002 fué la mejor debido a sus factores climáticos.
También cabe destacar la bodega Vila Francioni en las regiones del Valle de San Francisco y Santa Catarina, que tiene una exquisita gama de vinos rojos y blancos de gran calidad.
Vinos brasileños destacados
Villa Francioni
Lote 43 Cabernet/Merlot
Salton Desejo Merlot
En Sierra Gaucha, en el Estado de Río grande do Sul, la sierra y los valles marcan la belleza del Valle de las viñas, en el municipio de Bento Gonçalves, destino ideal para quienes aprecian el enoturismo.
En una área de 82 km2, que representan más del 50% de toda la producción vitivinícola del país, las vides y las pequeñas propiedades rurales dividen el espacio con vinícolas renombradas.
A lo largo de los últimos años, las productoras lograron destacarse en el mercado nacional e internacional por la calidad y personalidad de sus vinos.
Desde 1.996, los vinos brasileños vienen recibiendo premios internacionales, como la Medalla de Oro en el concurso francés “Vinalies Internationales 2.005”.
Entre los premiados estaban Aurora Reserva Chardonnay 2.004 y Menegotto Espumante Brut.
Sabores, jugos y mermeladas
Aventurarse en la región es descubrir sabores, no sólo de los vinos, sino que también de jugos y mermeladas, especialmente preparados en las vitivinícolas.
Además de la gastronomía, el turista disfruta del encanto de la arquitectura colonial de la región, inspirada en construcciones del Veneto y de la Calábria, en Italia.
Los municipios de Caxias do Sul (Valle Trentino), Cotiporã, Garibaldi, Nova Prata, Protásio Alves, Veranópolis, Vila Flores y Bento Gonçalves, son parte de La ruta del vino.
Datos de Producción de la Región :
Región : Sierra Gaucha
Variedades Tintos : Pinot Noir, Cabernet Sauvignon, Merlot, Carmenère, Tannat, Cabernet Franc, Pinotage, Ancelota, Gamay Beaujolais Variedades Blancas: Chardonnay, Moscato Bianco, Malvasia, Prosecco, Gewürztraminer, Malvasia Bianca, Semillón, Flora, Trebiano.
Variedades Blancos : Moscatel, Muskadel, Chardonnay, Sauvignon Blanc, Silvaner, Moscato Canelli.
Variedades de Mesa : Niágara, Couderc 13, Seyve, Villard, York Madera, Isabel, Concord, Seibel, Hebermont, Bordeaux.
Valle del río San Francisco
El Valle del San Francisco, en Pernambuco, presenta una creciente consolidación en la vinicultura brasileña.
Responsable por el 95% de la uva de mesa cultivada en Brasil y por la producción de cinco millones de litros de vino por año, el estado viene destacándose como modelo de desarrollo para el Nordeste.
La vinicultura pernambucana ya abarca un 15% del mercado nacional y emplea, directamente a 30 mil personas en el Valle de San Francisco, única región del mundo que produce dos cosechas y media por año.
Santa María de Boa Vista
A pesar del poco tiempo de emancipación política, el municipio de Laguna Grande ya ostenta una historia prometedora.
La localidad, que en 1.997 dejó de ser distrito de Santa María de Boa Vista para ser elevada a la categoría de ciudad, hoy es uno de los atractivos del Polo Vitivinícola de Pernambuco.
El municipio posee una producción anual de 20,5 millones de Kg., de uvas y de siete millones de litros de vino, exportando parte de este volumen a otros países y diversos estados brasileños.
Fiesta de la uva y del vino
En Lagoa Grande, conocida en todo Brasil como la capital de la uva y del vino del Noreste, hay cerca de diez viñas, responsables por la generación de 10,5 mil empleos.
La Fiesta de la Uva y del Vino ofrece a los visitantes y habitantes de Lagoa Grande diversas atracciones.
Además de degustar las uvas y vinos de la ciudad, los participantes del evento pueden conocer algunas propiedades de la región para pasear entre las parras y presenciar todas las etapas de producción del vino, desde el cultivo de la uva hasta el acondicionamiento del vino.
Área de uvas viníferas : 500,00 hectáreas.
Área de uvas comunes: 7.000,00 hectáreas.
Viñas que producen en la región del Valle de San Francisco : Bianchetti, Botticelli, Garziera, Lagoa Grande, Miolo - Hacienda Ouro Verde Vinibrasil.